1. La muerte de Manuel, por inesperada, fue un golpe inmenso para cada miembro de la familia, cada uno pensaba que era el más afectado.
2. Domingo, vino con urgencia desde Badajoz, donde estaba haciendo su servicio militar, pero no llegó a tiempo para el entierro y el funeral.
3. Manuel, era una institución en Eibar, ya que ayudaba a las personas mayores o discapacitadas a arreglar los papeles para poder cobrar una pensión o una ayuda.
4. Desde hacía varios años, aparte de su trabajo ordinario, era vicepresidente de la Mutualidad Siderometalúrgica de Guipúzcoa.
5. El funeral y entierro resultaron una gran manifestación de duelo. Asistieron diversas autoridades y cerca de 3.000 personas.
6. La familia no encontraba consuelo, se miraban los unos a los otros y se abrazaban llorando, se encontraban desamparados.
7. La situación económica colapsó. Domingo seguía con su servicio militar y no aportaba nada de dinero.
8. Entre la pensión de viudedad de Juli y la de orfandad de Juan, no llegaban a la cuarta parte del salario de Manuel.
9. Isabel, con su trabajo de damasquinado, era la que en aquel momento estaba sustentando a la familia.
10. Al cabo de unos tres meses, Domingo dejó el servicio militar y se reincorporó a su anterior trabajo. La economía se equilibró.
11. Juan, con 13 años, es quien más afectado se sintió, adoraba a su padre. Sus oraciones rogando por la salud de su padre no habían sido atendidas.
12. Como consecuencia de ello, Juan se apartó del culto y dejó de rezar. Estaba enfadado con Dios.
13. Llegó el verano, y con él las vacaciones. Juan encontró trabajo en una fábrica; tenía habilidad manual y era inteligente.
14. Estuvo bien arropado por los oficiales de más edad, de los cuales, Juan aprendió muchos trucos de taller.
15. A los quince días recibió su primer salario. Era poco dinero, pero Juan corrió a entregárselo a su madre.
16. Pasó el verano, Juan se presentó a los exámenes de ingreso en la 'Escuela Especial de Mecánica de Precisión y de Armería' de Eibar.
17. Consiguió entrar con el número tres. Toda una hazaña, ya que se presentaron más de quinientos candidatos, para ochenta plazas.
18. Las aficiones de Juan eran: el cine, ir al monte con sus amigos y leer. Era muy independiente. La muerte de su padre lo volvió más introvertido.