西班牙语学习网
Capítulo XIX LA VISITA DEL SEÑOR ROBINSON(7)
日期:2023-11-08 16:32  点击:244

—Usted deseaba su muerte.

—Sí, pero no la maté. ¡Oh! ¡Tiene usted que creerme! Yo no me moví de mi asiento. Yo...

Enmudeció, fijando en él su mirada implorante.

—La creo a usted, señora, por dos razones. Primera: porque es una mujer. Segunda, porque había una avispa.

Ella abrió más los ojos, sorprendida.

—¿Una avispa?

—Exacto. Ya veo que no tiene ningún sentido para usted. Bueno, volvamos al objeto de mi visita. Yo me las arreglaré con el señor Robinson. Le doy mi palabra de que no volverá usted a verle, ni a oír hablar de él. Pondré a raya a ese sinvergüenza. Y a cambio de mis servicios, tendrá que permitirme usted un par de preguntas. ¿Estaba el señor Barraclough en París la víspera del crimen?

—Sí, almorzamos juntos, pero le pareció preferible que fuese yo sola a ver a la prestamista.

—¡Ah! ¿De veras? Permítame otra pregunta, milady: en el teatro, antes de casarse, a usted se la conocía con el nombre de Cicely Brand. ¿Era este su verdadero nombre?

—No, mi verdadero nombre es Martha Jebb. Pero el otro...

—Quedaba mejor en los carteles. ¿Y dónde nació usted?

—En Doncaster. Pero ¿por qué?

—Mera curiosidad. Perdone. Y ahora, si me permite darle un consejo: ¿por qué no arregla un divorcio discreto con su marido?

—¿Para que se case con esa mujer?

—Para que se case con esa mujer. Tiene usted buen corazón, señora. Por otra parte, se verá usted a salvo, vivirá tranquila y su marido le pasará una renta.

—No suficientemente buena.

—Eh bien, una vez libre, puede casarse con un millonario.

—Ya no hay millonarios en nuestros días.

—¡Ah! No lo crea, señora. Los que antes poseían tres millones, ahora tienen dos. Eh bien, con eso basta.

Cicely se echó a reír.

—Es usted muy persuasivo, monsieur Poirot. ¿Está usted seguro de que ese hombre no volverá a molestarme?

—Palabra de Hércules Poirot —aseguró solemnemente.


分享到:

顶部
09/29 19:26