足疗
En la totalidad del cuerpo humano, se encuentran unos 219 territorios reflejos básicos y el cuerpo responde directamente a la estimulación de dichas zonas, que están íntimamente relacionadas con las cadenas musculares. La elasticidad del pie se recupera relajando su musculatura; los puntos de apoyo se normalizan y junto a él todas las cadenas musculares, incluyendo los trayectos vasculares en donde se logra el equilibrio ideal.
La técnica de la reflexología consiste en aplicar presiones sobre el pie del paciente, el cual posee un determinado número de zonas reflejas que se corresponden con todas las partes del cuerpo. Si bien es una práctica muy antigua que surge hace un poco más de 4000 a?os en Egipto y China, no se basa en los puntos energéticos del ser humano como otras terapias orientales, sino que se basa fundamentalmente en el aspecto fisiológico.
Para estimular los puntos, se utilizan los dedos pulgares e índice, masajeando las zonas a tratar de acuerdo a la dolencia del paciente involucrado, logrando una adecuada estimulación al órgano o sistema a tratar. Aparte de servir como tratamiento, la reflexología también sirve como terapia para prevenir enfermedades y también ayuda a la temprana detección de las mismas. Una sesión de reflexología también ayuda a liberar estrés que pueda tener el paciente, haciendo que éste experimente una mejor calidad de vida.
El objetivo de la reflexología es obtener un resultado saludable de los órganos, sistemas o estructuras a través de una correcta estimulación aplicada a sus correspondientes microreflejos. Con ello, se logra restaurar el balance natural de la energía y la funcionalidad armónica de la totalidad del organismo.